Este término designa un tipo de ciberataque que consiste en sustituir los puntos de acceso a Internet inalámbricos (Wi-Fi) originales por clones falsos que tienen el mismo aspecto que su «gemelo» y suelen presumir de una señal más potente. Si te conectas a esta red, los ciberdelincuentes pueden leer los datos entrantes y salientes.
Los gemelos malvados son muy difíciles de reconocer. Por lo tanto, te recomendamos que solo utilices redes desconocidas si no hay otra alternativa. No debes introducir información crítica, como derechos de acceso o datos de pago, mientras utilizas la red WLAN de otra persona. En su lugar, puedes instalar un programa RPV (red privada virtual) o pedirle a tu gestor informático que lo configure. Con esta red privada, puedes navegar por Internet de forma segura.